
La Aldea – Restaurante con opciones sin gluten en Comillas (Cantabria)
Actualizado el 8 de septiembre de 2020
El municipio de Comillas tiene varios lugares turísticos para visitar, como el Palacio de Sobrellano y El Capricho de Gaudí. En nuestro paso por Cantabria decidimos visitar estos dos museos y, entre una visita y otra, aprovechamos para comer cerca.
No teníamos planeado comer allí, por lo que tuve que indagar un poco por Internet de forma imprevista y así pude encontrar el restaurante adecuado: La Aldea, del que hablaban bastante bien respecto a sus platos sin gluten.
Este restaurante, lo encontraréis en la calle la Aldea, 5, en Comillas. Solo abre los fines de semana y festivos, a excepción de las épocas vacacionales como semana santa y verano, que suelen abrir durante la semana. No hacen reservas para no tener ninguna mesa parada y así poder ofrecer siempre sus servicios. Si tenéis cualquier duda por si va a estar abierto o no, creo que es mejor que llaméis y lo confirméis de antemano.
Al llegar, como siempre, expliqué mi condición de celiaca y pregunté por la elaboración de sus platos y la contaminación cruzada. La verdad es que la chica que nos atendió fue muy atenta y paciente conmigo. En la carta tenían señalados los platos sin gluten. Al tomarnos nota, me preguntaron cuáles eran los platos de los que iba a comer yo, para tenerlo en cuenta en su elaboración.
También tenían cerveza y pan sin gluten. El pan que tenían era el de la marca Proceli, en un envase individual que hacen especial para hostelería, en el que vienen dos porciones de pan.
Nos sirvieron una tapa de crema de pimientos con picos, pero en mi caso, sin yo decirles nada, me trajeron una ración para mí sola; con el pan de Proceli y así evitar la contaminación cruzada.

Como entrante pedimos unas zamburiñas. La verdad que nos aficionamos a este rico manjar de la zona. ¡Qué buenas estaban!

También pedimos un chorizo a la sidra. ¡Riquísimo!

Como plato principal, yo pedí merluza a la plancha con gambas rizadas.

La pega de este restaurante es que no tenían ningún postre sin gluten. Así que me quedé mirando. La verdad, ya que tienen la intención, podrían tener algún postre apto para nosotros. Aún así, comí muy bien, que era lo importante. Espero que hoy en día hayan mejorado en este aspecto.
Tengo que decir, que este restaurante no está acreditado por la Asociación de Celiacos correspondiente. A mí me transmitieron confianza, tanto cuando les pregunté por sus platos sin gluten y la contaminación cruzada, como por el trato, el cuidado y la atención que recibí mientras me servían los platos (teniendo en cuenta mi celiaquía). Aún así, os recomiendo que antes de ir llaméis y os aseguréis por vosotros mismos, ya que en los restaurantes puede haber cambios: en su manera de trabajar, en los dueños, en la carta, etc. Hay que destacar que en la Asociación de Celíacos de Cantabria, según su página web, hay muy pocos establecimientos acreditados (a día de hoy, ocho). Todos sabemos que hay asociaciones que funcionan mejor o peor que otras y, por supuesto, las personas celiacas tenemos que comer cuando salimos fuera de casa, así que, no nos queda otra opción que apoyar este tipo de establecimientos que intentan ponernos la vida más fácil, por supuesto, siempre teniendo cuidado. Aún así, quiero recalcar que todos mis posts son escritos y basados en mi experiencia personal y la responsabilidad de comer en un sitio u otro siempre será de quien finalmente decida o no comer en ese sitio.
Dicho esto, espero que os haya gustado el post. Comillas es un pueblo muy bonito, con mucho encanto y con varias actividades culturales para poder hacer. ¡Qué mejor plan que añadirle a todo esto una buena comida!

Booking.com